Mercedes-Benz GLA, rompe el molde de una SUV compacta

Una de las novedades de Daimler en el North American International Auto Show 2017 -NAIAS-, también conocido como Auto Show de Detroit, es el facelift al que fue sometido el Mercedes-Benz Clase GLA.

Así es, a cuatro de años de su debut en el Auto Show de Frankfurt, este SUV compacto competidor del BMW X1, Infiniti QX30 y Audi Q3 recibe una serie de actualizaciones en el exterior e interior.

Como ocurre en la gran mayoría en los facelift, la carrocería recibe un rediseño en las fascias, en los faros -ahora de LED- y en los stops. Acompaña a esta renovación estética una nueva gama de rines y el color café metálico denominado Canyon Beige.

Al ser únicamente una renovación estética las dimensiones del Mercedes-Benz Clase GLA 2018 se mantienen intactas, esto significa que mantiene la longitud de 4,415 mm, el ancho de 1,805 mm y la altura de 1,495 mm. Para quienes no estén tan familiarizados con este SUV compacto, el largo queda a 200 mm del Clase C sedán.

Junto a esta transformación del exterior, el interior de esta segunda etapa de la primera generación del Clase GLA renueva la pantalla de ocho pulgadas del sistema de información y entretenimiento, ahora además de ser más delgada ofrece una mejor lectura, una cámara de 360 grados y apertura automática de la quinta puerta. Al mismo tiempo, el cuadro de instrumentos recibe agujas en tono rojo, insertos en cromo en el panel de instrumentos y salidas del aire acondicionado de nuevo diseño.

Donde tampoco existen cambios es en la gama de motores, por lo que este Mercedes-Benz Clase continúa ofreciéndose como GLA 200 y GLA 250. En el primer caso el cuatro cilindros de 1.6 litros contribuye con 156 hp y 184 libras-pie de torque, en tanto que la segunda opción arroja 211 hp y 258 libras libras-pie de torque. Para la transmisión puede ser manual o automática -doble clutch de siete cambios- GLA 200 y para el GLA 250 sólo está la opción de la caja automática.