Sé que muchos de los que lean esto apostarían por el Giulietta, pero soy un hombre soltero que no requiere de cinco puertas y es por ello que me inclino por el MiTo –nombrado así por la relación entre las ciudades de Milán y Torino. Se trata de un hermoso hatchback, el cual no niega los rasgos de la marca italiana y te permite soñar en ocasiones que vas en el deportivo 8C (al menos eso me sucedía en ocasiones al verlo reflejado en las facias de los autos delante de mí).
Lo interesante es que sin tratarse de un auto nuevo –fue presentado oficialmente en junio del 2008, aunque internacionalmente lo hizo hasta el Autoshow Británico del mismo año; el Giulietta es incluso más reciente.
Me queda claro que el seductor MiTo será una tentación para aquellos que piensan en comprar un MINI Cooper S, un Audi A1 y tal vez hasta un Fiat 500. Es hermoso por donde se le vea, además que la versión Quadrifoglio Verde tiene lo mejor de varios mundos. Es el pretexto ideal para comenzar el 2012 como el centro de atención, que al lugar que vayas se acerque alguien que posee alguno de los hatchs antes mencionados y te pregunte: “disculpa, ¿tú traes el Alfa?” y luego se vaya con un “sí”, obviamente con un tono que raye entre modestia y soberbia.
Pero para no quedar en ridículo debe haber potencia suficiente, al menos para mantener el ritmo de un A1 o un Cooper S –del “Cinquecento” ya ni hablamos hasta que no haya un Abarth. Así que el MiTo se ofrece con un motor cuatro cilindros de 1.4 litros turbo que desarrolla 170Hp a las 5,500rpm y un torque de 184 Lb-Pie desde las 2,500rpm. La transmisión es manual de seis velocidades, desarrollada por FIAT Powertrain Technologies, y lleva a las ruedas delanteras todas las capacidades del tren motriz Multi Air. No se desarrolla nada mal, es un auto de 1,145 kilogramos y la pequeña motorización turbo lo mueve ágilmente (no tanto como al MINI Cooper S). Con una velocidad tope de 219 Km/h y un tiempo de 7.5 segundos para alcanzar los 100Km/h, tal vez no sea el más veloz, pero para un servidor no es discutible que es el más bonito.
El MiTo cuenta con algo muy interesante para variar los estilos de conducción, se trata del Alfa Romeo DNA, el cual permite elegir entre tres distintos tipos de puesta a punto del auto: Dynamic, Normal y All Weather –si son observadores se darán cuenta que cada inicial del tipo de manejo se aporta para lograr que quede como DNA. Dicho sistema se manipula a través de un selector situado en la consola central, justo al lado de la palanca de cambios.
El MiTo fue provisto además de un diferencial electrónico, que permite una mayor adherencia y menor pérdida de tracción mediante la repartición de torque en las ruedas delanteras. Eso compensa bastante la insuficiente evolución de la marca al utilizar un eje rígido trasero.
Y para cerrar, por dentro es bastante ergonómico, con un equipamiento por demás bueno para un auto que quiere ser Premium, una calidad sumamente buena de tapizados, pero sí hay que decir que el tacto de algunos mandos (como los botones del quemacocos) es mejorable; aún así, les puedo decir que yo felizmente compraría uno.