Los nuevos Mazda Vision X-Coupe y Mazda Vision X-Compact, parecen tener toda la intención de anticipar las nuevas generaciones de los Mazda 3 y Mazda 2, dos exitosos modelos que ya tienen varios años en el mercado. Para hacer más especiales estos modelos conceptuales, la firma de Hiroshima estrenó logotipo en ellos.
Desde 1997, Mazda comenzó a utilizar el emblema que hoy conocemos, una 'M' estilizada que representa las alas de un ave, enmarcadas en un círculo con un diseño tridimensional.
A partir de este año, la compañía introducirá poco a poco esta imagen de marca, que pierde la tridimensionalidad, alineándose con la tendencia actual en el mundo automotor de tener logotipos planos, con una 'M' menos estilizada y con los ángulos de las alas más marcados. La tipografía del nombre también será nueva.
Siguiendo con las novedades de Mazda en el Japan Mobility Show, la firma presenta dos concept cars que evocan de inmediato a los Mazda 2 y Mazda 3, y que podrían darnos una idea de la estética que pudieran tener sus futuras nuevas generaciones. Al 2 le urge un poco más, pues el modelo actual data de 2014, mientras que el 3 se lanzó en 2019, aunque ambos han tenido importantes actualizaciones.
Antes que nada, Mazda aclara que la letra 'X' en estos modelos se debe leer como "Cross", así que El Mazda Vision Cross Coupe, que marca la evolución del lenguaje de diseño Kodo, con una estética que mantiene la elegancia y gran presencia de los Mazda actuales, pero con un claro guiño al futuro.
En este caso, el Cross Coupé tiene un tren de potencia híbrido enchufable con un motor rotativo, de dos rotores, turbocargado y se complementa con un sistema eléctrico que le ayuda a generar 510 hp de potencia, con la novedad de utilizar un combustible carbono neutro que se extrae de microalgas, una tecnología desarrollada por Mazda.
También incorpora el “Mazda Mobile Carbon Capture” (otra tecnología propia), que captura el CO₂ del escape del vehículo, para que estos contaminantes no lleguen a la atmósfera.
El fabricante declara una autonomía de 160 kilómetros cuando se usa un solo motor (suponemos que el eléctrico) y 800 kilómetros totales al emplear todo el sistema.
Hay que destacar la elegancia y sencillez del interior, que combina de gran forma elementos como un volante clásico, tres relojes redondos digitales y un par de delgadas pantallas multimedia en el resto del tablero.
La segunda propuesta es el Vision Cross Compact, un pequeño hatchback urbano que busca una verdadera simbiosis entre el conductor y el vehículo, “mediante un modelo sensorial de inteligencia artificial. Actuando como un compañero de viaje, es capaz de entablar conversaciones y sugerir destinos. Esto representa la visión de Mazda sobre el futuro de la movilidad inteligente, en la que los vehículos y las personas establecen una conexión emocional, muy similar a la que se tiene con un amigo”.
Esperemos ver en los próximos años cómo estos dos modelos conceptuales permean la estética y las tecnologías de Mazda.
