Contestar a esta pregunta depende de muchos factores y con el objeto de ayudarlo a esclarecer algunas de ellos a continuación le damos algunos tips que permitirán tomar la mejor decisión.
Mantenimiento regular
Aunque pueda sonar muy obvio, un vehículo requiere de un mantenimiento frecuente después de haber recorrido cierto número de kilómetros. Es necesario para que funcione a la perfección y así aminorar el daño por el uso continuo del mismo. Si a su unidad no le ha hecho un servicio de afinación regular, cambio de aceite-frenos, así como un trabajo de alineación y balanceo entre otras cosas. Seguramente en el corto plazo empezará a darle problemas y lo mejor en este caso es venderlo si no está preparado –o no tiene el dinero- para gastarle lo suficiente y tenerlo en óptimas condiciones.
Tenerlo al aire libre
Si tu garaje está al aire libre. El sol, la lluvia, el polvo entre otros fenómenos dañan la pintura del vehículo, le quitan el brillo, la decoloran al grado de posiblemente oxidar la lámina. Si no ha cuidado la pintura de su auto y se encuentra en estas condiciones lo mejor es venderlo, ya que un trabajo para repararla es costoso, además de que no va a ser exactamente el mismo tono que el de fábrica.
Un auto muy viejo
Quizá tiene su vehículo en óptimas condiciones, pero si éste ya tiene algunos años, encontrar refacciones es un problema enorme; incluso puede pasar que tengas que modificar piezas o mandar hacer alguna. Cual sea el caso esto es costoso y lleva tiempo, si su presupuesto no alcanza, lo más conveniente es venderlo. Ahora, sí el dinero no es problema y desea tenerlo como objeto de colección, pues adelante será la envidia de muchos amantes de los carros.
Considerar su depreciación
Si tiene poco tiempo con su auto –o incluso lo adquiriste nuevo- su valor monetario es mayor que uno más viejo. Es decir un auto usado con algunos años en el mercado está más depreciado que uno con pocos años; asimismo dependiendo de la marca como el modelo puede que valga más o menos. Aquí la toma de decisión radica en que pierdas menos dinero, por lo que vender un auto que tiene poco en el mercado es mejor que deshacerse de uno que no puede obtener mucho por él, en este caso el uso que le de, vale más que lo que consiga monetariamente.