Mansory Torofeo, un Lamborghini de lidia

Este Mansory Torofeo con más de un millar de caballos de fuerza es una de las cinco novedades que el tuner alemán presnta en el Auto Show de Ginebra 2015.

Existe la teoría que da lo mismo tener un vehículo con 700 hp o 1,200 hp, si bien la brecha de poder entre uno y otro es amplia, la diferencia en los tiempos de aceleración de 0 a 100 km/h se traduce en variaciones de apenas una décima de segundo. Es indiscutible que para exprimir adecuadamente la potencia de un auto de este tipo se necesitaría vivir en un autódromo.

Sin embargo, hay personas que siempre desean hacerse notar diciendo que tienen un auto con 1,000 hp, o más aun, cuando solamente exploten el 50 por ciento de su capacidad. Pensando en esa clase de personas se ha creado el Mansory Torofeo, una interpretación radical del Lamborghini Huracán.

Este auto que hace referencia a la palabra toro, muy apegada a la marca italiana, y a los autos de carreras Super Trofeo, contiene una serie cambios en el diseño exterior e interior, así como en la cabina.

Dentro de esta serie de actualizaciones Mansory metió mano en el V10 de 5.2 litros para elevar sustancialmente el poder. Al instalar nuevos pistones, árbol de levas, un intercooler, un par de turbocompresores, así como un nuevo sistema de escape, el 10 cilindros convierte al Huracán en un verdadero mísil. Decimos esto porque la potencia se sitúa en 1,250 hp a 8,250 rpm, esto es más del doble que el modelo de serie. De la mano de esta cantidad de caballos de fuerza, el torque –limitado electrónicamente- pasa a 737 libras-pie.

Una vez que se lleva el acelerador a fondo el poder recibido en las cuatro ruedas hacen que el Mansory Torofeo acelere de 0 a 100 km/h en 2.7 segundos. Asimismo, la velocidad máxima es de 340 km/h.

Con esta potencia es necesario que la carrocería tenga los elementos para controlarla, por lo que Mansory ha incorporado un kit de fibra de carbono que aumenta la carga aerodinámica. Con este paquete, el súper deportivo es 30 milímetros más ancho en la parte delantera y 40 milímetros en la trasera. Igualmente faldones laterales, guardabarros mejorados, un alerón y un difusor. Complementa este trabajo un set de rines de 20 pulgadas para el eje frontal y de 21 para el posterior. Al igual que el exterior y el motor Mansory también refinó el interior del Huracán. Toda la cabina fue reformada con cuero, Alcántara, aluminio y fibra de carbono.